Los primeros días se basaron en conocernos, formar y trabajar como grupo para conectar entre nosotros. Con dinámicas y actividades para sentirnos más unidos y aprender a trabajar en equipo.
Sin que pase diez años como en la canción de Ismael Serrano, me he vuelto a encontrar con otro amigo en Budapest. No hemos faltado a nuestra cita.
Ha sido una visita parecida en un principio a la de Sofía y Marián. Pero he descubierto algunas cosas nuevas de Budapest...El domingo tenía que coger el autobús a las 17, así que no quedaba mucho tiempo para mí, aun así aproveché mis últimas horas en la capital con mis amigos, dimos un paseo por la ciudad, comimos en la Gran Vía, fuimos a la Plaza Mayor y visitamos el mercadillo que está allí.
Al final he de decir que Madrid merece la pena totalmente...Esta semana hemos tenido que hacer mucho porque terminamos con el instituto Jovellanos y también empezamos con el Roces. Entonces, fuimos cada día...