La semana pasada fue especial para mi: mi madre y mi tía vinieron a visitarme. Pasamos unos días geniales juntas. El jueves, después del trabajo, fui a la estación de autobuses para cogerlas. Estaba tan feliz y no podía esperar a verlas, así que casi corrí con mi vestido. Al principio era surrealista hablar con ellas cara a cara porque no las veía desde navidad. Pero después de algunos minutos me sentía como si no hubieran pasado tres meses sin verlas.
Les mostré toda la ciudad, cómo vivo aquí y los lugares más bonitos de Gijón: la playa de San Lorenzo, el centro y los parques con vistas bonitas de la ciudad. Tuvimos suerte con el tiempo, de modo que pudimos disfrutar aún más del sol y la playa. Hice un esfuerzo para entrar en el mar. Pero madre mía ¡qué frío! Nadar en marzo...en qué estaba pensando... Pero hizo falta hacerlo porque esto estaba en mi lista de las cosas que quería hacer antes de marchar: bañarme con biquini en el Cantábrico. Por supuesto comimos los platos típicos y a ellas les encantó la comida asturiana. Están enamoradas de Tierra Astur: la comida tan rica, la atmósfera y la decoración.
Ellas también quieren introducir las tapas y la manera de compartir comida en Alemania. Juntas descubrimos nuevos lugares, cómo Cudillero (es un pequeño pueblo pequeño que vive de la pesca con casas y calles de varios colores) y Perlora. Perlora es el complejo vacacional más ambicioso de Asturias, totalmente abandonado. Fue muy interesante ver un municipio que no está lleno de vida y por eso casi teníamos una playa sola para nosotras.
Cudillero
Perlora
Los días con mi familia pasaron volando. Acababan de llegar y al momento siguiente tenían que irse. Pero no estoy triste porque marcharon, voy a verlas en un mes y el último mes que me queda voy a usarlo para disfrutar la vida lo máximo posible.
Ese jueves Luis, nuestro compañero de trabajo, vino a la clase de inglés porque nos lo prometió.😇 Fue muy divertido y nos reímos mucho. Jugamos "Time is up", un juego en que tiene que explicar palabras sin decir la palabra. Todos estaban adivinando y motivando a su equipo, un ambiente competitivo.
No hay Jueves de Tapas sin nosotras
El viernes pasado Manon y yo tuvimos una charla en Cuantayá sobre el voluntariado y el CES. Hablamos sobre nuestra motivación, experiencia y las condiciones. Me divertí mucho porque a pesar de no preparar todo, fue bien y no tuve que pensar que quería decir.