Terve! (¡Como véis los finlandeses tienen tantos saludos como saunas!)-Alba Morante-SVE en Finlandia

En enero tocaba volver al pueblín de cuento después de las navidades en España, y aunque, como siempre, las vacaciones se me hicieron cortas, sentía que estaba volviendo a otra home sweet home, ésta con muuucha mucha nieve pero tampoco con mucho más frío (Valladolid, desde ahora conocida como la ciudad de la Laponia española :D). Además solo tenía semana y media para disfrutar de mi Eskola querida porque a mediados de enero tuvimos el segundo training de evs (servicio de voluntariado europeo). Esta vez no nos pillaba tan cerquita por lo que Noelia y yo cogimos un tren hacia Helsinki y desde allí recorrimos unos pocos kilómetros en bus ya con más voluntarios hasta Sopukka, un establecimiento enfrente del mar con cabañas, piscina cubierta y sauna todo para nosotros solitos, ¡yupi!

sve
A diferencia del primer training, en este no estábamos todos los jóvenes que realizamos nuestro voluntariado en Finlandia y, aunque les echamos de menos, nos lo pasamos genial. Ya lo había experimentado otras veces, pero es que siempre me sorprende (y encanta) la facilidad con la que se conecta con gente cuando estás fuera de tu país. Será porque todos estamos viviendo una experiencia parecida y que, no nos engañemos, la mayoría estamos en pueblitos dejados de la mano de Dios un poquito desesperados por tener un chute de vida social con gente de nuestra edad :D Además, de estas situaciones suelen surgir muy buenas amistades en las que, aunque no te veas muy a menudo, siempre es como si no hubiera pasado el tiempo (aunque alguno diga que sólo son amigos en Finlandia...¬¬).

Después de estos días que, ¡cómo no!, se me hicieron cortos, Noelia y yo cogimos un ferry ¡dirección Estonia! Primer país de los que espero sean muchos, que visito desde Finlandia y, ¡qué bonito y qué bien nos lo pasamos! Y eso que nos perdimos un poquito al principio...¡Mira que es pequeño Tallinn! Pues Noelia y yo le dimos unas cuantas vueltas de más hasta llegar al hostal...diremos que era por el cansancio del viaje y que, personalmente, de noche veo peor jajajajaj (¿cómo te quedas con mi excusa miope 2.0?) Por lo demás todo genial, hicimos el free tour (soy fan fan y ciudad grande que visito, allí que voy) y comimos y cenamos en sitios muy chulos.

sve
Ya para terminar el mes, hice una de las últimas cosas que me faltaba de lo que me había propuesto hacer en Finlandia: AVANTO. Se trata, ni más ni menos que de nadar en un agujero hecho en el hielo. ¡Ayayayyy! Para los que no me conocen tengo que decir que estoy un poco p'allá y diría yo que desde que vivo en Finlandia un poco más, pero prometo que antes de venir a este país nunca imaginé que me atrevería a meter siquiera un pié en agua congelada... Todavía me acuerdo de cuando vi en el programa de Calleja a una persona hacerlo y pensé: ¡qué forma más gratuita de pasar frío! ¡vaya chalada más tonta! Bueno pues ahora ¡esa soy yo! ¡Y oh my friends, cómo me equivocaba!  Es una de las cosas más refrescantes y, para mí, una de las pocas veces que se respira de verdad. Sin duda repetiré.
Terminé enero pensando en cuál podría ser el próximo destino de mi siguiente viaje y es que ¡a esta chiflada le queda mucho mundo por conocer!

"El mundo es un libro y aquellos que no viajan solo leen una página". - San Agustín