Telecable de Gijón, ¡Adelante!-Cristian Mirto-SVE en España

Desde esta semana que sigue a la marcha de Löis y Leila, la responsabilidad por idear, organizar y conducir los encuentros semanales del curso de inglés está toda sobre Kimi y yo. No es tarea sencilla; en particular, no es fácil decidir qué tema elegir para que los participantes discutan entre ellos.

 Al final, hemos resuelto hablar del "tiempo". Con el tiempo, no tenéis que entender el tiempo atmosférico, lo que todavía es bastante generoso ahora con Gijón, y que nos otorga sol más que lluvia y calor más que frío. Las cuestiones pedían tratar argumentos como la gestión del tiempo libre y la relación con el tiempo que pasa, que se marcha. En verdad, fueron temas, quizá, un poquito pesados. Todavía no hemos recibido quejas. Sin embargo, la proxima semana vamos a tratar sobre la navidad y las fiestas, y seguramente la atmósfera será más alegre.

En el resto de mi tiempo libre estoy buscando mejorar mi nivel de español. Día tras día, me siento más confiado de mis capacidades. Mi opinión es que lo más importante, cuando hay que aprender algo, es siempre el entrenamiento y el estudio. Esto es así para tocar bien un instrumento musical, para aprender matemáticas y, además, para controlar los idioma. El voluntariado es una experiencia que debe ser aprovechada, y esto no significa solamente disfrutar de la posibilidad de viajar y descubrir nuevos lugares. Para mi, el voluntariado debe ser una oportunidad para invertir en mi mismo y espero alcanzar todo lo que es posible alcanzar en mi trabajo voluntario aquí. A la hora de mi vuelta a Italia, me propongo hablar un español casi perfecto, siendo consciente de que, como decían los latinos: "homo faber fortunae suae".

Acabado el pequeño discurso motivacional, os cuento mi fin de semana. Fue muy agradable gracias a los Gijoneses que me invitaron a ver partidos de hockey sobre patines en un bar cerca de mi piso. De hecho, el equipo femenino de hockey patín de Gijón estaba luchando para ganar nada menos que la copa intercontinental. El Telecable de Gijón es, en verdad, un equipo muy talentoso y actual campeón de Europa. El sábado, tras una sustanciosa sesión de sidra, vimos la semifinal, que el Telecable ganó gracias a un gol durante el tiempo adicional. Obviamente vimos también la final del domingo. Desafortunadamente, nuestro equipo terminó el torneo con la segunda plaza. Como demuestra la bufanda puesta sobre la pared de mi habitación, el Telecable ha adquirido un aficionado más después de la copa intercontinental. Lo sé, y lo siento, que esto es de poco consuelo.

La próxima semana llegará la Navidad, y será para mi la primera vez fuera de mi pueblo. Hace un año me estaba graduando, y nada sabía de Gijón como tampoco sabía de Asturias. He pasado un año que me enseñó tanto. Quizá, me enseñó también un poco más el valor de la familia. Por eso, quiero decir gracias a mis padres, y pedirles disculpas porque no voy a estar con ellos durante las fiestas.