La vuelta al cole (postconfinamiento)- Angela Castaño desde la Rep. Checa

Necesité mi tercer mes de voluntariado para entender a Sabina cuando se preguntaba que quién le había robado el mes de abril. Y lo entendí porque parece que fue ayer cuando empezaba abril con la esperanza de volver al cole presencial y de volver a ver a todos los niños de nuevo, lo que por fin se hizo realidad.

 

Reviví esa sensación de cuando eres pequeño y empiezan las clases después del verano. Algunos que no paran de crecer y otros que te abrazan como si se hubieran acordado de ti cada día. La diferencia es que por aquel entonces yo también crecía, y ahora solo lo hacen ellos. Pero qué bonito es verlo.

  

Volvemos a la "normalidad". Entre comillas porque tenemos que hacernos dos pruebas de Covid a la semana, y no todos los cursos han podido volver. Pero al menos nos despegamos de las pantallas, volvemos al contacto físico, a preparar clases, juegos y excursiones... Volvemos a ser niños otra vez. Porque sí, llega el viernes y mi cuerpo necesita descansar, pero cada semana me vuelvo a recargar de esa energía que tienen ellos y que consigue transportarme a mi niñez.

Empiezan a abrir fronteras, hemos podido conocer más sitios nuevos, entre ellos Praga. También hemos conocido a otros voluntarios que están aquí en República Checa. Mayo promete, tiendas, restaurantes y museos volverán a abrir si todo va bien. También estamos deseando que abran las fronteras para poder volar a todos los países que nos rodean, pero mientras tanto seguiremos exprimiendo todos los rincones de República Checa, que no son pocos.

 

Este mes también ha sido mi cumpleaños, sumando 24 y sin duda echando de menos a mi gente de España, pero también uno de los cumpleaños más especiales. Lleno de sorpresas, regalos especiales, vídeos y flores. Unos 24 que no olvidaré nunca.

 

Os seguiré contando mi experiencia el próximo mes... ¡Hasta entonces!

Angela