Nuevas Generaciones ha decidido desvincularse del Conseyu de Mocedá, porque «es una federación que no nos representa y está centrada en atacarnos y desprestigiarnos en boca de su presidente». La entidad centra sus acusaciones en Javier Suárez Llana, que ostenta la presidencia por Estudiantes Progresistas, pero que está ligado a IU, lo que le achacan desde NN GG. Consideran los jóvenes del PP que Suárez ha puesto en marcha iniciativas «con el único objetivo de protestar contra el Gobierno de la nación» y que «repite como un lorito los mensajes de su partido». «Condenamos esta obsesión de la izquierda por controlar asociaciones y movimientos para dar una falsa imagen de movilización social».
Las críticas van más allá al calificarle de « radical de izquierdas». Censuran el funcionamiento del Conseyu, donde dicen que participan muy pocas entidades. «No lo hacen asociaciones de la trascendencia de Abierto Hasta el Amenecer, Mar de Niebla o Cruz Roja Juventud porque en nada les ayuda ni el CMX ni su presidente».