«De esta locomotora salen palabras como respeto, ayuda, comprensión... sin esas palabras este tren se pararía. Estamos de cumpleaños y lo vamos a festejar con la tarta más rica del mundo». María López Álvarez, la autora de estas palabras, tiene 10 años. La misma edad que «Súbete a mi tren», el proyecto de animación escolar al que lleva subida cinco años y que ayer inició en el salón de recepciones del Ayuntamiento los festejos de su aniversario. La pequeña estudiante del Colegio Asturias y su compañero Samuel Varela, de 7 años y estudiante del Colegio García Lorca, fueron los primeros en dar la enhorabuena a los monitores de esta organización cultural, nacida en La Calzada siguiendo el rastro de la premiada «Abierto hasta el amanecer». Después llegaron los elogios de los profesores, de las entidades colaboradoras y de la Administración municipal, representada por el concejal de Educación, Justo Vilabrille.
«Los niños son nuestra bandera y nuestra ilusión. Pensamos que estamos haciendo algo bueno con los peques y que tenemos una responsabilidad al compartir con los centros escolares la tarea educativa», explicaba el actual presidente de «Súbete», Francisco Pavón.
«Súbete a mi tren» comenzó en cinco colegios de la zona oeste y ahora mismo tiene implantación en 22 colegios públicos. A lo largo de esta década han realizado actividades extraescolares con 5.400 niños y han dado trabajo a 200 jóvenes como monitores en un proyecto que profundiza en la educación, genera empleo y facilita la conciliación de la vida familiar y laboral. Sus diez años de historia -con sus rostros, números y experiencias- se han convertido en una exposición que «itinerará» por los centros municipales gijoneses. ¿La próxima? En diez años.
Una exposición itinerante presentará la historia de «Súbete a mi tren», del 26 de mayo al 24 de octubre, en los centros municipales de El Llano, Gijón-Sur, La Camocha, El Coto y La Calzada.
«Súbete a mi tren» festeja su aniversario este sábado con una doble cita en la Laboral: teatro para los más pequeños, a las 17.00 horas, y un pincheo con los monitores, a las 19.00 horas.