La tendencia se invirtió en 2008 gracias al repunte de la natalidad y la llegada de inmigrantes a la región
Asturias envejece y la prueba irrefutable de ello está en los datos definitivos del padrón municipal correspondientes al 1 de enero de 2008, publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística. Las series históricas del INE revelan que, sólo durante la última década, la región perdió 42.749 jóvenes menores de veinte años.
La merma de este grupo poblacional resulta evidente desde 1998, cuando en la región había empadronados 193.891 asturianos que no rebasaban la veintena frente a los 151.142 que residían en el Principado el 1 de enero de 2008.
A similar población -en 1998 la población asturiana ascendía 1.081.834 habitantes frente a los 1.080.138 que hay actualmente-, mucho menor peso de los jóvenes. Ese es, a grandes trazos, el resumen poblacional de la Asturias de la última década, los tiempos más duros de la crisis industrial, en los que los mayores ganaban peso progresivamente en la pirámide poblacional de la región.
En concreto, mientras que la población joven se reducía en más de 40.000 personas durante esos años, el grupo de mayores de 65 años sumaba 13.782, al pasar de los 221.533 empadronados que superaban la edad de jubilación hace una década a los actuales 235.315 mayores de 65.
Mayores de 85 años
El mayor aumento se ha producido en la horquilla de habitantes entre 80 y 84 años, que se incrementó en 12.896 asturianos. Además, hoy hay casi 10.000 personas de 85 años o más que hace una década: 9.551.
En el otro extremo, el del balance negativo, la mayor sangría poblacional es especialmente evidente en el grupo de edad comprendido entre los quince y los diecinueve años, un segmento que perdió 29.327 personas.
Las últimas cifras, sin embargo, invitan al optimismo, ya que la tendencia se invirtió ligeramente durante el año pasado. Así, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística, entre 2007 y 2008 el segmento de asturianos más jóvenes, el de aquellos que están por debajo de la veintena, creció en 242 personas gracias a un leve repunte de la natalidad y, sobre todo, a la llegada de inmigrantes, fundamentalmente, rumanos.
Este incremento se vio acompañado de un ligero descenso en la horquilla de mayores de 65, que pasó de 235.518 habitantes en 2007 a los 235.315 de 2008.
Asturias acaba de romper la barrera de los 1.080.000 habitantes, una cifra que no alcanzaba desde 1999. En concreto, la región sumaba 1.080.138 personas a 1 de enero de 2008 frente a las 1.074.862 del año anterior. Se trata del mayor incremento poblacional de la región desde hace quince años.