M. IGLESIASLa suerte regresó a Gijón en forma de dos boletos de la bonoloto, agraciados con 28.405 euros cada uno. Y es que ayer se repartieron millones de euros por toda España entre siete premiados, de los cuales dos habían adquirido su suerte en la administración de lotería número 16 de la calle Cabrales.Un total de 56.810 euros, casi diez millones de las antiguas pesetas, fue lo que Mari Sol de la Concha repartió entre los afortunados, aunque no estaba segura de si era la misma persona que había jugado dos veces con idéntica combinación de números.El ganador, o ganadores, acertó cinco dígitos más el complementario. La combinación ganadora es: 10, 13, 24, 27, 28, 49, complementario el 12 y reintegro el 2. «Nadie vino por aquí reclamando el premio», decía ayer la responsable de la administración número 16 de Gijón, por lo que ella desconoce cuál falló. Aunque ésta no es la primera vez que Mari Sol de la Concha reparte suerte entre sus clientes de siempre. «El premio más gordo lo entregamos en el año 1982, cuando repartimos 200 millones de pesetas en el primer premio de la lotería de Reyes», explica la lotera. Posteriormente, y después de varios grandes premios, llegaron los euros. «En 2002 vendimos un billete de lotería premiado con 600.000 euros», cuenta De la Concha.El último gran premio que repartió Gijón fue con la lotería nacional, el pasado 30 de marzo, cuando la administración número 5 de Palacio Valdés repartía el primer premio. En el despacho de la familia Muñiz Urteaga se habían vendido diez décimos del número 78.818, agraciados con 60.000 euros cada uno. En total, 600.000 euros.Una buena despedida para la titular de la oficina, Rosa María Urteaga, que se jubiló dejando a sus dos hijos al frente de la administración de lotería, con 68 años de historia. Sólo una hora y media antes del sorteo, la mujer había vendido el último boleto del número que les quedaba en el establecimiento. Tampoco era la primera vez que en la administración se daba un premio de estas características.En el mismo mes, la fortuna también recayó en Gijón, esta vez en la administración de loterías situada en el número 141 de la avenida Schulz, donde la quiniela dejó más de 700.000 euros, aunque el nuevo millonario tampoco había aparecido por la administración y comentarios vecinales apuntaban a El Llano. El apostante había gastado 16 euros en un boleto de 32 apuestas.Éste fue el mayor premio que dejó hasta entonces la quiniela en la ciudad de Gijón.